Me
interesa poder llegar y acercarme sobre todo al imaginario del hombre de
provincia, y por eso tomo lo que creo que está muy instaurado en su imaginario;
las fiestas originarias de su región. Selecciono cinco regiones, sus fiestas y
sus trajes masculinos (cuyo uso por parte de una mujer podría resultar
¨ofensivo¨) y lo combino con partes de mi cuerpo que evidencien mi cuerpo de
mujer.
Para mi
resulta importante, y hasta de urgencia, poder evidenciar que estas imagines
fotográficas son exhibidas por su propia autora, y así poder dar a entender que
no son fotos creadas por hombres para hombres (tratando de satisfacer algun
tipo de necesidad erotica – sexual, como en la publicidad), sino que hablamos
de una mujer que decide mostrar su cuerpo.
En una
sociedad en que la frase ¨ella tiene la culpa por usar minifalda¨ (es decir por
enseñar más de lo ¨devido¨), aún tiene vigencia y total legalidad, es importante
poder devolverle a la mujer su derecho a mostrarse de la forma que ella desee
ser vista. Una delgada línea un tanto peligrosa.
El cuerpo
desnudo, es una forma que he trabajado en otras acciones, porque considero de
vital importancia, sobre todo para el contexto en el que vivo, un entorno
cucufato, de aparente libertad pero en el fondo aún con muchos prejuicios y
represiones, como es la sociedad limeña. Liberar mi cuerpo de capas y mostrarlo
tal cual, es un acto de devolverle su humanidad, todos tenemos brazos, piernas,
cabeza, algunos tetas otros no, algunos pene otros vagina, y todos en nuestra
naturaleza merecemos respeto.
Con estas premisas
trabajo mi imagen trasvestida buscando cuestionar y generar diálogo en torno a
la identidad de género, los términos “machismo” y “feminismo”, apostando por la
idea de un cuerpo de multiplicidad sexual, de equilibrio entre sus múltiples
opciones y libre de prejuicios sociales. Un sueño?
Para esta
serie fotográfica llamada ¨Nadie me quita lo bailado¨ - la danza de los
géneros, utilize los trajes de:
- “Colla”. Utilizado en la fiesta en honor a la Virgen del Carmen.
Paucartambo, Cuzco, por la comparsa de los collas. Comparsa compuesta por
varones, su único personaje femenino es interpretado por un hombre y no tiene
rostro ya que usa un pasamontaña negro. Eso sí adoran a la Virgen del Carmen.
- “Capachica hombre”. Utilizado en diferentes fiestas de la
provincia Capachica, Puno. Escogido por la dualidad de su nombre y por ser la región
Puno uno de las regiones con mayor tasa de machismo en el Perú.
-
“Huacón”. Utilizado en la
fiesta La Huaconada. Mito, Huancayo. Comparsa sólo de varones, no existe el
personaje femenino.
-
“Chonguino”. Danza típica que imita a su forma los vals de salón
de los antiguos españoles. Huancayo. En él se observa el rol del hombre
elegante y caballeroso.
-
“Diablo Mayor”. Utilizado en la Fiesta en honor a la Virgen de
la Candelaria, Puno. Escogido por la evidente dualidad del Diablo.